Soluciones de packaging industrial para los almacenes de la nueva era
Pequeños robots a escasos centímetros el uno del otro que nunca llegan a colisionar. Drones volando por encima de cientos de contenedores y estanterías. Brazos robóticos armados con ventosas para agarrar embalajes. Sensores controlando las entradas y salidas de mercancías. Dispositivos inteligentes de temperatura, humedad y antivuelcos. Bienvenido al almacén de ahora y del futuro.
A medida que crecen las empresas y los mercados se convierten en infinitas redes comerciales interconectadas, se están volviendo obsoletas las estructuras logísticas utilizadas hasta el momento. Los embalajes y contenedores deben ser reformulados para un nuevo entorno, más exigente, más globalizado y más ágil, donde la innovación continua es imprescindible.
Los centros de distribución también se están adaptando. Eso significa un cambio de los almacenes tradicionales de cintas transportadoras a centros automatizados similares a colmenas. Lo que puede parecer aleatorio, es en realidad una operación milimetrada que se basa en algoritmos, códigos de barras y, sí, manos humanas capacitadas y expertas. El aumento de la complejidad en los almacenes también tiene consecuencias en los embalajes. Echemos un vistazo al papel que desempeña el packaging para ayudar en el proceso durante las diferentes etapas cruciales en el almacén.
La recepción de mercancías es la primera etapa y uno de los procesos básicos y rutinarios de la cadena de suministro. Una correcta planificación te ayudará a ahorrar tiempo y reducirá el número de incidencias. Asimismo, es muy importante conocer al detalle el stock, así como la ubicación exacta de cada mercancía para reducir tiempos y mejorar el proceso de entrega y su colocación en el lugar correspondiente.
Para gestionar la información sobre cada mercancía, existen dispositivos de embalaje inteligentes que te facilitarán esta tarea. Sin embargo, una buena planificación puede que no sea suficiente para ser eficiente si no eres capaz de automatizar el proceso de recepción de mercancías. Soluciones como como los embalajes retornables para cadenas logísticas automatizadas pueden ser una buena opción para optimizar el proceso de entrega, así como toda la cadena logística.
Entre nuestras soluciones retornables podemos destacar:
- Trenes Lean. Se trata de estructuras metálicas con ruedas optimizadas para el transporte de piezas, aprovechando al máximo el espacio disponible y facilitando el flujo de piezas. Con ellos, se optimiza la recepción y su inclusión en las líneas de montaje, eliminando el stock en ellas.
- Tower racks. Estas torres metálicas de grandes dimensiones para almacenamiento en altura, al realizarse a medida y multimaterial, cubren todas las necesidades de la cadena de suministro, actuando como embalaje, almacenamiento y abastecimiento a línea. Cuentan con la posibilidad de incluir ruedas para facilitar su traslado, pudiendo ser movidas de forma manual, mediante trenes Lean o con AGV’s.
- Fold bac. Es un embalaje plegable de manutención que ayuda a maximizar el ahorro en costes durante el transporte y almacenamiento, ocupando hasta ⅔ menos plegado. Al estar diseñado a medida de las piezas, se pueden enviar más productos por embalajes.
- Bac-up. Su diseño a medida, 100% personalizable y multimaterial hacen que se adapten totalmente a las piezas y sus características. Son robustos, ligeros, apilables, encastrables, con carga lateral o superior, haciendo de ellas una solución ergonómica.
En una segunda fase podemos destacar la importancia de optimizar el espacio en el almacén. Para ello, debemos tener en cuenta dos aspectos principales a la hora de realizar el diseño: Si deben ser apilables, plegables o, incluso, ambas. También existen opciones, como en el caso de los tower racks, cuyo diseño permite el almacenamiento en altura, sin necesidad de apilarlo.
Por el contrario, hay empresas para las que el almacenaje no es una etapa crítica, ya que las piezas pasan directamente a las líneas de montaje -o en un corto periodo de tiempo-. En este caso, cobran más relevancia los diseños preparados para el abastecimiento de las líneas.
Por último, pero no menos importante, nos encontramos en la etapa en la que el embalaje ya ha cumplido su función. ¿Ahora qué ocurre con ellos? En esta etapa debemos atender a su circularidad. Los clientes demandan cada vez productos más sostenibles, lo que está llevando a las marcas a preocuparse por una mayor sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de suministro. Algunas optan por embalajes reciclables fabricados en cartón ondulado. Otras, por packaging que les permita reutilizarlos.
Un buen diseño de packaging puede conducir a reducir los costes totales y a minimizar los riesgos de toda la cadena logística. ¿Tu embalaje está preparado para el almacén del futuro?